Como comen las desgraciadas!! Y crecen como dinosaurios. No les concedía yo tal esperanza de vida aquel día cuando, como idiota, cedí ante tan inocente proposición del tipo:
-Papá papá, ya se que el perrito no nos lo compras, pero una tortuguita de estas pequeñas siiiiiiiii, porfaaaaaaaa.
Que entonces piensas,
- "joder, alguna pequeña concesión tendré que hacer para calmar los ánimos del deseo de mamíferos y otros bichos no comunes".
Y entonces de nuevo piensas...,
-"vale, 10 euritos y tres meses en casa".
El error ya empieza en la percepción que uno (yo) tiene del posible precio de aquellas dos miniaturas verdes junto con sus necesidades, el segundo error lo estoy comprobando a medida que pasan los meses y los dinosaurios crecen. No es que no me gusten, junto con las iguanas son los animales del Cretácico que prefiero.
El fallo está en que sean semiacuáticas.
Y puto caso que les hacen!!!...además cagan.
Bueno nada más, voy a mirar el recetario.
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